Granada y Almería son las provincias encargadas de acoger en su término municipal esta Sierra. Sus montañas llegan a superar los 3.000 metros, alturas en las que habitan cabras montesas, gatos salvajes o tejones. De hecho esta altitud también es la responsable del crecimiento de especies florales que solo crecen en espacios como estos, con temperaturas y altitudes determinadas.

Sus altas cumbres son vistas desde kilómetros a distancia y frecuentadas por los aficionados a los deportes de nieve que sobre todo en invierno se encargan de ocupar las pistas de esquí que hay en el Parque.

Más de 2.000 especies vegetales habitan en esta zona que se combinan con una amplia comunidad tanto de animales mamíferos, como de aves e invertebrados.

Históricamente, esta zona ha sido poblada por griegos, cartagineses o romanos que han ido dejando huella en la arquitectura del Parque con modernos sistemas de regado o construcciones como las acequias.

Destacar además de Sierra Nevada los  pueblos situados en las laderas de la montañas, característicos por sus fachadas blancas y ventanas pequeñas.